domingo, 24 de abril de 2011

Las vivencias de un actor natural

Por Daniela Arbeláez Ocampo




La actuación no es sólo un estudio para toda la vida; es también sentir en la sangre la pasión y las ganas de interpretar a un personaje ficticio que se convierte en una realidad. Para los que se ven reflejados en diferentes artistas como York Fredy Monsalve, un actor natural que sin estudios llegó a la pantalla grande de Colombia.
                                        
Antes de entrar al apartamento de Fredy me encontraba muy ansiosa de conocerlo. Al ingresar a su vivienda me recibió con una sonrisa y me invitó a sentar. En medio de la música pop y los ladridos de un perro de raza pug, llamado Tony, me puse cómoda y la conversación empezó con mucha empatía.

Fredy estudió eléctrica-electrónica pero hoy trabaja con transportes, servicio público, propiedad raíz, electricidad electrónica y balanza. “Yo soy todo heroico a la actuación, o sea soy un actor con todo. Si se dañan las cosas de la casa,  las arreglo; soy el mecánico y el taxista de noche, le halo a todo un poquito”.

Cuando comenzó la entrevista lo primero que se me ocurrió preguntarle fue: ¿Quién es un actor natural? Él me dijo: “Una persona que en realidad nunca ha recibido estudios de actuación. Es alguien que se mete en el personaje que el director ha planeado, así no haya trabajado con cámaras, logrando las expectativas que se quieren en el momento de la grabación”.

Fredy Monsalve es un ser espontáneo que logró su sueño interpretando a uno de los personajes importantes en la película “Sumas y restas”, una de las más taquilleras en Colombia en el año 2004 y bajo la dirección del cineasta antioqueño Víctor Gaviria.

Su personaje fue “El duende”, mejor amigo de Santiago, un ingeniero que hizo su carrera como constructor y agente inmobiliario. “El duende” era una persona extrovertida, conversadora, risueña, rumbera y pícara.

“El casting para la película era interactuar con otra persona. A mí me gustaba mucho grabar pero no era capaz de enfrentarme a las cámaras”. Mientras Fredy recordaba este momento, miraba para el techo. Sus ojos reflejaban alegría.

“Llegué a la oficina de Víctor, en ese tiempo le decían la ‘ducha fría’, me senté en una mesa a improvisar con otro amigo como si estuviera hablando por teléfono”.

Monsalve es carismático, le gusta hablar mucho de diversos temas, en especial los ficticios. “Me parece que es mejor improvisar que seguir un guión al pie de la letra”. Esta habilidad fue la que le permitió desempeñar un excelente papel en el casting.

Su preparación la realizó con los principales protagonistas de la historia. “Como éramos cinco personajes importantes de la película teníamos que estar juntos de arriba para abajo practicando mucho”.

Fredy, con un profundo suspiro me contó que los ensayos eran extenuantes. “Empezamos a trabajar y a improvisar todos los días, íbamos a la oficina de la 'ducha fría' y ensayábamos, hasta que le fuimos perdiendo el miedo a las cámaras”.

Antes de comenzar a grabar, York Fredy y sus compañeros de trabajo tuvieron una preparación aproximadamente de ocho a diez meses.

Sonó el teléfono y en ese momento Fredy hizo una pausa, se levantó de la silla y se fue a contestar. Al regresar me dijo: “Personificar por primera vez un personaje importante no cambió del todo mi vida,  hay un momento en el que uno empieza a ascender y cree que puede coger el mundo con las manos y de inmediato va a ser un famoso”.

El hecho de haber participado en un largometraje le ayudó a conocer varias ciudades de Colombia. Con el fin de promocionar la película y posteriormente recibir los premios, viajó a Bogotá, Pereira, Cartagena, Cali, Bucaramanga, entre otras.

Su participación en ‘Sumas y Restas’ le significó una de las experiencias más gratificantes en su vida. “Conocí varias personalidades como Víctor Gaviria y Fabio Restrepo; aprendí de la actuación sin haber estudiado, con la preparación que obtuve fue como si hubiese estado en una escuela de la mano de Víctor”.

Una de las anécdotas que no quisiera recordar fue cuando viajó a Cartagena a la entrega del premio India Catalina y en su momento les tocó competir con ‘El Rey’, una producción caleña. “Cuando nos otorgaron el premio, que muy merecidamente lo ganamos, la directora de El Rey estaba llorando”.


York voltea su cabeza al lado opuesto y con voz sarcástica dice: “Esta directora expresaba que era imposible que una película como la nuestra, que no tuvo presupuesto, hubiera ganado el premio India Catalina y, ellos que le habían invertido todo con actores famosos, no ganaran”.

Su inicio en el cine había sido por casualidad. “Yo era amigo de Leidy Tabares y Giovanny Quiroz, ‘El Zarco’ en la vendedora de rosas. Habíamos trabajado juntos en el programa ‘Muchachos a lo bien’, que fue trasmitido por varios años en canales regionales,  y  me dijo que fuera a presentarme al casting que Víctor Gaviria estaba haciendo para la película Sumas y Restas”. Desde ese momento, Fredy Monsalve promovió la actuación en su vida.

Para Monsalve fue duro comenzar en la actuación porque que la jornada de grabación era muy extensa: 12 horas diurnas y otras veces 12 nocturnas.
“Nunca imaginé representar a un personaje que no era yo, fue un reto para mí”. York mueve su cuerpo con debilidad diciendo: “Era muy complicado porque siempre llegaba estresado y cansado a mi casa y mi esposa me hacía un masaje para relajarme”. Sin embargo, él consideró que no  era  un obstáculo para dejar a un lado la actuación, siguió adelante y logró interpretar a un personaje importante en la película de Víctor Gaviria.

En la conversación, Fredy agrega diciendo que la remuneración de los actores naturales de Colombia no es considerada como un estímulo al arte y, argumenta levantando la ceja: “Vivir en Colombia siendo actor natural es muy complicado, casi imposible, se tendría que luchar bastante, como un trabajo constante”. Luego de esto hace una pausa y le pide a su hijo Tomás que se lleve al perro porque está molestando mucho.

Continúa diciendo: “Como actor natural los contratos no son muy seguidos porque en Medellín son pocas las películas, las sacan por años, por eso es difícil”.

Al finalizar la entrevista, York Fredy Monsalve enciende su computador y empieza a mostrarme cortos de la película, se levanta de la silla y me muestra los afiches que le dieron del estreno del largometraje. Los abre y con una sonrisa termina diciendo: “Me gustaría hacer mi propia película, escribirla, dirigirla y estar como actor en ella porque sería parte de mi historia”.

A Fredy le gusta actuar en películas pero ha participado más que todo en cortometrajes con compañeros del politécnico Jaime Isaza Cadavid, la Universidad Eafit y la Universidad de Antioquia. 

4 comentarios:

  1. una buena película felicitaciones a todo su elenco

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  2. Las mejores historias para el cine patito son las de nuestra realidad y más en nuestra eterna crisis, te gustaría hacer películas en Venezuela??

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  3. Soy julio gonzalez .
    Si alguien sabe de york fue mi compa en bachillerato en el inem del pobladome gustaria volver a saludarlo.
    Estoy en costarica .
    Juliogonzalez52pos@gmail.com

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